MEMORIA MÉTRICA

Miscelánea del escritor José Miguel Domínguez Leal

martes, 30 de mayo de 2017

MATRIX HISPANA





En la película Matrix (02000) Morfeo señalaba a su pupilo Neo que resultaba imposible rescatar a las personas del mundo virtual en que vivían a partir de cierta edad, al estar tan acomodados a ella que la conciencia de su servidumbre voluntaria les resultaba insoportable.

En la España actual resulta también insoportable la idea de que no hay democracia. Nos hemos acostumbrados a vivir en un simulacro donde se nos hace creer que por votar cada cuatro años participamos en una "fiesta" donde ejercemos un deber cívico, y tomamos parte determinante en la vida política del país, eligiendo, por ende, a los representantes de la soberanía nacional. Así se nos martillea constantemente desde los medios de comunicación y sus tertulias, donde no se cuestiona nunca las reglas de juego de quienes los sustentan, la clase política, garante de nuestras libertades desde la promulgación de la Constitución del 78, "que nos costó tanto conseguir", como se oye a menudo.

Pero no hay nada más lejos de la realidad: en España no hay democracia, porque, por una parte, la presunta Constitución de la que disfrutamos no nació de unas Cortes Constituyentes, sino de las reuniones secretas de un grupo de notables del Franquismo y de la ex oposición oportunista ansiosa de participar en el pastel del poder, y, por otra parte, porque dicha Constitución, para que pudiera considerarse como tal según estableció Montesquieu, debería reconocer la separación de poderes y el principio de representación política, como garantía juridica de la libertad política colectiva. Pero no hay separación de poderes, sino separación de funciones, como en el Franquismo, lo que está en el germen de la corrupción generalizada como motor del régimen partidocrático que sufrimos, y el sistema electoral proporcional, consagrado en la Constitución -cosa inaudita en nuestros entornos constitucionales-, sólo sirve para refrendar las listas electorales creadas por los jefecillos de los partidos, cuyos diputados no representan, pues, a sus electores, sino al jefe que los ha puesto allí, a quien deben una obediencia, ante la que los militares argentinos de la época de Videla quedarían como unos James Dean desbocados.

"Recuerda que sólo puedo ofrecerte la verdad", le advirtió Morfeo a Neo antes de que tomara la pastilla de su liberación, poniéndole delante de las dolorosas consecuencias de su valerosa elección. En España no hay democracia, esta triste certeza, que hace vacilar el suelo bajo nuestros pies, no nos deja más remedio que pasar a la acción, pues, como Neo, ya no tenemos vuelta atrás.

sábado, 27 de mayo de 2017

FIESTAS Y DUELOS




Pueden coincidir en un mismo día la fiesta y el duelo. Ayer me preparaba para asistir a la ceremonia de graduación de mis alumnos de Bachibac, y me llegó la noticia de la muerte de un tío materno ya muy enfermo. Acompañé a mi madre al tanatorio, y estuve un tiempo con la familia. Más tarde asistí al acto de graduación. El contraste entre la alegría desbordante de tantos jóvenes ante su salto al resto de sus vidas fuera del instituto, y la triste evidencia de la muerte anonimante no me resultó sorpresivo, quizás por ya repetido rito. Ya a ciertas edades uno debe aceptar que parte de lo que le queda de vida se irá en tales ceremonias de iniciación y de despedida.




Imagen: Dj Spock (Weimar blog).

martes, 23 de mayo de 2017

EL ESPÍRITU DE LA 5ª REPÚBLICA FRANCESA




Es sabido que la 5ª República Francesa fue instaurada por el general De Gaulle, que pretendía poner fin al caos institucional de la 4ª República, acentuado por la guerra de Argelia. De Gaulle estableció un sistema electoral mayoritario de distrito uninominal a doble vuelta, frente al antidemocrático sistema proporcional anterior. Era, pues, un sistema parcialmente democrático, pues aseguraba el principio de representación, aunque no la separación de poderes (el poder legislativo debía refrendar el gabinete del Presidente), el otro puntal de la democracia formal. La posterior financiación de los partidos políticos por parte del Estado vino a empeorar esta situación.
En una de las recientes ediciones de su programa Répliques en France Culture, el filósofo Alain Finkielkraut invitaba al profesor de ciencia política y filósofo Philippe Raynaud, autor del libro epónimo del programa, y al periodista político Jean-Claude Casanova. Este último, ante la situación creada en la primera vuelta de las últimas elecciones presidenciales, en la que quedaron eliminados los candidatos de los dos principales partidos de gobierno, y que eventualmente dificultará que el próximo Presidente cuente con una mayoría de apoyo parlamentario, proponía el cambio a un sistema electoral mixto como en Alemania, para asegurar gobiernos de coalición fuertes como en Suiza. Finkielkraut replicaba que De Gaulle había creado precisamente la 5ª República para evitar los débiles gobiernos de coalición de la 4ª. Por su parte, Raynaud comenzaba caracterizando la 5ª República como un sistema partidista (système partisan) de sistema electoral mayoritario a doble vuelta, y llevaba aún más lejos la propuesta de Casanova, al preconizar la instauración de un sistema electoral proporcional, para conseguir alianzas parlamentarias que excluyan al Front National, partido que no se integraría, y que se aprovecha, en cambio, de las ventajas que le ofrece el sistema mayoritario -afirmaciones sorprendentes si se piensa que el mismo FN pide en su programa electoral la instauración del sistema proporcional-. Finkielkraut, a su vez, replicaba que, en tal caso, los jefes de partido formarían las listas electorales a su antojo, y que los partidos usarían el voto del ciudadano para hacer las alianzas que quisieran -justo lo que ocurre en España-.
Sorprende, en fin, el tacticismo cortoplacista de los invitados del meritorio programa, y su falta de conocimientos de teoría política, que les lleva a despreciar los principios de la democracia formal, que el general De Gaulle recuperó parcialmente para su país sin saberlo; docta ignorantia que ahora está en riesgo de ver perder sus frutos ante la catastrófica posibilidad de que Francia se convierta en otro Estado de Partidos como España.
Puede verse, en definitiva, en este fenómeno la presión que está ejerciendo sobre Francia la socialdemocracia partidocrática que predomina absolutamente en la Unión Europea, y de la que Inglaterra ha logrado librarse.




Imagen: Elecciones presidenciales en Francia en 01965

viernes, 19 de mayo de 2017

ENVIDIAS





Descubrir la envidia en los otros, y el frecuentemente subsiguiente deseo de causarte daño gratuitamente deviene estupefaciente. La hipocresía no resulta, en este caso, "el homenaje que el vicio rinde a la virtud" (La Rochefoucauld) sino la otra cara de la moneda del descrédito hacia ti que el envidioso intenta hacer circular entre el resto de conocidos comunes, sea vecinos, amigos, o compañeros de trabajo. El resentimiento provocado por una ahogada conciencia de fracaso existencial se vuelve en una alivio venenoso, convirtiéndose en objetivo de la existencia, al marcar un enemigo a batir, fetiche cuya caída sería la ilusoria solución a los propios males, como el sueño huidizo descrito en la Ilíada.
De la estupefacción se pasa a la ira, y, luego, al asco ante ese lamentable espectáculo de indignidad humana, en la certeza de que no es cierto que se vaya con la verdad a todas partes. Esto no empece, sin embargo, la necesidad de defenderse atacando por mero interés de supervivencia y sentido de justicia natural.
Si no eres capaz de guardar una inquina parecida, sigues sintiéndote vulnerable en la medida de que sientes que la fuerza del odio, como decía André Glucksmann, es superior a la del amor.



Imagen: Victor Tkachenko

viernes, 12 de mayo de 2017

LA CRISIS DE LA EDICIÓN





El pasado martes 9 de mayo participé en una mesa redonda de editores independientes de la Feria del libro de Cádiz en representación de la editorial MCRC. Durante su desarrollo, se apuntó la idea de que la crisis del mundo editorial ha estado provocada por la autoedición, es decir, por los blogueros que publican en forma de libro parte de sus páginas web, creyendo que todo el mundo puede ser artista.
El argumento me pareció dudoso, y así lo contestaron otros participantes. Ahora bien, si, por un parte, estoy de acuerdo con que la idea democrática del arte -la última consecuencia del arte modernitario igualitario que prescinde de la necesidad de inspiración y técnica- es perniciosa para el verdadero arte, por otra parte, estimo que la autoedición o la coedición es la única vía de publicación -en ocasiones exitosa- de escritores que no quieren o han podido verse favorecidos con el capricho pigmaliónico de editores en ocasiones endiosados y volubles (y, en todo caso, legítimamente preocupados por la viabilidad de su negocio), ni someterse a la estafa recurrente de los premios literarios.
Convivan, pues, todas las vías de publicación, y que incluso se combinen, multiplicando los formatos.


Imagen: Pantograph.