MEMORIA MÉTRICA

Miscelánea del escritor José Miguel Domínguez Leal

miércoles, 28 de septiembre de 2011

HOJAS DE LA SIBILA (II)

Quizás el agotamiento sea otra forma de iluminación.
Vuelvo a casa con paso inseguro, y veo que nadie ha regado las plantas de la terraza, que parecen aguardarme en su atroz indiferencia.
Todos los días se han vuelto miércoles.
Ya no quedan ni palabras, sólo la nostalgia inarticulada de lo que pudo ser, e ignoras.
La generosidad al enseñar va acompañada, en mi caso, de un creciente egoísmo respecto a lo que estoy dispuesto a soportar.
En este comienzo de curso encuentro curiosamente en la lista de entradas populares dos con las que cerraba mis dos últimos cursos. Parece como si el azar quisiera venir a darme ánimos.

sábado, 24 de septiembre de 2011

HOJAS DE LA SIBILA

El otoño llega de soslayo, escoltado por un sol más tibio, y me pilla en pleno comienzo de un año que para mí es mucho más real que en enero, que sólo es una ficticia prórroga. ¡Quién me iba a decir que el mundo de los blogs iba a convertirse también en una cuestión de trabajo! He creado un blog de trabajo para mis alumnos de 2º de Bachillerato donde les cuelgo actividades y documentos, y mañana pienso hacer otro para los de 1º; aparte de eso, el jueves pasado creé otro para la biblioteca del instituto, ¡blog que habrá que ir llenando de entradas! Para mí era una cosa recoleta, e íntima. Recuerdo que hasta hace poco no sabía enlazar. No me había interesado por ello. Procuraba espaciar un poco mis entradas para que tuvieran un valor en sí mismas, y les buscaba una ilustración adecuada. Llevo un par de semanas que carezco de ese vacar, para pensar un tema para las entradas. Soy demasiado modesto o tímido para hablar de mi "mismidad" cotidiana sin hacer referencia a cuestiones literarias o culturales, es decir, a practicar el puro diario. Creo que trataré el blog de momento como una especie de refugio, como un lugar donde reposar unos instantes entre un quehacer y otro, y que son muy absorbentes, al menos este comienzo de curso. Pensar que voy a escribir en cinco blogs me resulta ahora un poco exorbitante, pero podré superarlo.

Hablaba el otro día con mi pareja de un conocido político que vuelve al mundo de la docencia universitaria, y dije lo primero que se me pasó por la cabeza: "¡vaya! ahora le va a tocar hacer de pringadillo!". "No, -me dijo ella dándome un beso-, el pringadillo eres tú". No supe qué decir al saberme pringadillo para ella, por más que querido.

¿Puede que la poesía sea como una nota al pie de página de la propia vida? Sólo sobrevive aquello que se recuerda, aquello que se sublima o se degrada al compás de un ritmo que nos saca a bailar ante nuestro propio ser.


Imagen: fotograma de "Solaris" de A. Tarkovsky.

 

miércoles, 21 de septiembre de 2011

DÍAS DE SEPTIEMBRE (III)


Subidón. El comienzo de curso ha sido estresante. Muchos grupos y mucha responsabilidad. El cuerpo se va haciendo al nuevo horario y ritmo. ¡Empieza a quedar tan lejos el verano, y está, sin embargo allí, en la vuelta de la esquina del recuerdo! Tengo que preparar este curso a los alumnos de la Sección Bilingüe que se presentan a Selectividad y al diploma francés DELF B2, así como a los que se presentan al DELF B1. Estos días (y los que me quedan), no termino de preparar clases antes de las 9 o 9 y media de la noche, y lo dejo ya por pura higiene mental. Voy luego a casa de mi madre, saco a la perrita para que estiremos las piernas los dos (bueno, ella las patas), y vuelvo a mi casa sobre las 11. Reservo, sin embargo, un mínimo espacio para la lectura en la cama. Estos días, pues, se cierran mis ojos entre los aliterantes versos de Ovidio que narran las hazañas mágicas de Medea. ¡Vanos poderes para un hombre sometido a una vida tan ordenada y previsible como la mía!

Preparándome las susodichas clases, me he tragado la reciente entrevista a Dominique Strauss-Kahn en la TV francesa. No sé si mentirá o no, lo que si me ha llamado la atención es su mayúscula y sopesada soberbia.

Recuerdo que cuando me enamoraba no siendo ya adolescente, había un peculiar sentimiento de dolorosa ausencia que se adhería como una rémora de tristeza a la nueva excitación amorosa, como si fueran inquilinos obligados a compartir un piso ya demasiado atestado.

De la lectura de la revista El alambique me ha gustado mucho la cuidada traducción de Saint-John Perse a cargo de Luis Valdesueiro, y la selección de poemas y los textos dedicados a Julio Antonio Gómez. No se han ocultado sus luces y sus sombras, de acuerdo con un homenaje hecho desde el afecto más sincero, y resulta un ejemplo de cómo el progresivo silencio poético puede ser indicio de un profundo desmoronamiento interior.  


Imagen: exposición Rodin en Cádiz

sábado, 17 de septiembre de 2011

AL SERVICIO DE OTROS



La poesía es el modo de seguir siendo la misma persona (Czeslaw Milosz)


La tentación de guardar silencio es ahora muy grande. Me encuentro en el gozne de la adaptación a nuevas rutinas, y surge el leve pánico y la amenaza del hiato sobre todo lo que no sea trabajo, y reiteración doméstica. El tiempo se vuelve mi enemigo, mi cicatero arrendador. Como un inquilino moroso, busco modos de burlarle, de escaparme por la ventana de una cuadriculación espartana de su esencia, entorpecida por la reaparición de lo imprevisto, fuente de toda humildad y fe. "Jóvenes a los cincuenta", leí no recuerdo dónde. Y te ves forzado a desplegar una cada vez mayor actividad en beneficio de gente más joven, de la que no dejas de estar, por otra parte, separado por el muro creciente del tiempo y la experiencia. Me dan así ganas de cerrar el blog, por incomparencia propia. Eso, sin embargo, me provoca otra sensación de vacío, de liquidación, de sumisión a un silencio que no sería más que otra forma de derrota, todo lo cual debería ser congruente, empero, con cierto olvido de sí mismo, que me parece casi la única forma de liberación y paz.


Imagen: cartel del Valcárcel recuperado.

martes, 13 de septiembre de 2011

DÍAS DE SEPTIEMBRE (II)



Nada queda que no resulte máscara.

Vivir al albur de los días tiene sus ventajas e inconvenientes.

El viento cambia de dirección. Espero poder salir con bien de lo que me espera.

Encuentro disparidades entre los dos contadores que manejo. El hecho de tener menos visitas creo que sólo puede hacerme más libre.

Me hago a una imagen de mí mismo: trabajador responsable, simpático, hijo y pareja no demasiado mala; hay, sin embargo, una vocecilla que siempre me susurra por debajo que soy una impostura, que existe algo que dejo fuera, algo a lo que aspiro y que no me atrevo a -o ni siquiera sé- nombrar.

Imagen: noche toledana.

viernes, 9 de septiembre de 2011

DÍAS DE SEPTIEMBRE (I)

Septiembre se precipita en oleadas de tiempo furtivo e imperioso. Es el verdadero comienzo del año. Te reboza en proyectos, y en una perentoria estrategia de aprovechamiento numantino del propio tiempo si quieres hacerte la ilusión de que dispondrás de algún tiempo libre para tus modestos placeres: la lectura, la música, un meditativo dolce far niente... ¿para qué toda esta angustia arrasada? Será tanto el trabajo, la absorbente cotidianeidad ¿merece la pena pagar este precio por una ilusoria estabilidad y "saber estar" en tus delimitadas señas de identidad?

Cuanto más viejo me hago, más aprecio la llamarada fulgurante del instante, la emoción arrebatada, y me acongojan los proyectos contados en años, que son siempre cada vez menos.

La poesía me acompaña siempre en la antesala del sueño. La musito, la leo a media voz, la regurgito, dejo que me lacere o me deje indiferente, hastiado o transido. La poesía se sobrevive a sí misma. Ahí están los infieles editores que desoyen las instrucciones de los poetas difuntos, desde Virgilio a Cavafis. Cavafis eligió 154 poemas para ser publicados como su legado. Sin embargo, otros poemas no considerados maduros por el autor fueron publicados posteriormente. José María Álvarez en su edición de Cavafis para Hiperión publica todos estos poemas, incluso los preteridos por el propio poeta, como una capa añadida. Incluso éstos permiten alabar el buen criterio del propio autor. Veo en la selección de poemas de Cavafis una unidad basada en el orgullo de su pertenencia a una tradición cultural y lingüística, el helenismo, que se manifiesta en los poemas que se presentan como pequeñas estampas históricas ambientadas tanto en el mundo de la grecia clásica, como en el del período helenístico y bizantino. Jóvenes bellos y cultos, griegos, sirios, y alejandrinos suelen protagonizar estas miniaturas que resucitan un mundo perdido y arrasado por otros imperios, pero que ha conservado su esencia, ya desgraciadamente inublicable geográficamente, gracias a la sobrevivencia de la lengua griega, que ha mantenido su unidad a pesar de desastrosos factores exteriores, como la prolongada dominación turca. Esos mismos efebos son los protagonistas de los poemas homoeróticos en los que el poeta recuerda con a la vez amarga y dulce nostalgia su juventud, con su amada Alejandría siempre al fondo.

martes, 6 de septiembre de 2011

HIJO DE J. S. BACH




Bach tuvo un hijo negado para

la música. Su oído era duro

como una piedra de toque.

Pasó su remansada vida entre

el silencio y el ruido absorbente

de lo cotidiano amplificado.

Y heredó partituras que a veces

colgaba del revés de cordeles,

en edípico homenaje

a la belleza altiva y severa

que lo había engendrado del limbo

piadoso de la mediocridad.
 

 
Imagen: Johannes Grützke.